miércoles, 30 de diciembre de 2015

Reseña: Crescendo

Crescendo, la segunda parte de la saga Hush Hush

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Título: Crescendo
Autora: Becca Fitzpatrick
Editorial: B de Bolsillo
Número de páginas: 405
ISBN: 9788498729337
Precio: 9,95 euros
Citas/Frases: aquí





SINOPSIS:
A pesar de su fascinante relación con Patch y de haber sobrevivido a un intento de asesinato, la vida de Nora dista mucho de ser perfecta. Patch está empezando a alejarse y Nora no sabe si es por su bien o porque cada vez está más interesado en su archienemiga Marcie Millar.
Además, una serie de imágenes sobre su padre la acosan de manera recurrente. A medida que Nora se sumerge en el misterio de su muerte, comienza a sospechar que su sangre nefilin puede estar relacionada con el asunto. Pero Patch no le da ninguna respuesta, por lo que ella decide investigar por su cuenta, arriesgándose hasta el límite. ¿Qué verdad se esconderá detrás de la muerte de su padre? ¿Puede contar con Patch, o éste le oculta secretos más oscuros de lo que ella imagina?

OPINIÓN PERSONAL, CONTIENE SPOILERS DEL LIBRO ANTERIOR:
   Y aquí estamos de nuevo, escribiendo la reseña de la segunda parte de la saga de Hush Hush, de la escritora Becca Fitzpatrick. Después de la decepción que me llevé con la primera novela, no sabía cómo tomarme esta otra. Es cierto que en la reseña la anterior la ponía muy bien, y es cierto: me gustó bastante y me hizo leer, leer y leer hasta el final, pero no me llegó a convencer del todo. El primer libro se desarrolló de forma lenta, pero se leía con mucha rapidez. 
   Ya que en la reseña del primer libro no pude compartir con vosotros y vosotras mis opiniones sobre ciertos temas -porque ya sabéis que no me gusta hacer spoilers de una novela en su misma reseña-, lo haré ahora:
   Lo que más me gustó del primer libro fue sin duda el giro que la autora dio al final, me pareció increíble y perfecto. Logró engañarme durante toda la historia hasta que... ¡BAM! Me soltó la bomba de que Jules era Chauncey y de que quería matar a Nora. Creo que el final fue lo más emocionante de todo lo que sucedió.
   Bueno, creo que ya ha llegado la hora de hablaros sobre esta continuación:
   La narradora en este segundo tomo sigue siendo Nora Grey, la protagonista. Al principio me alegré de tenerla de nuevo como voz cantante, pero en algunas partes de la novela llegó a exasperarme. Estaba todo el rato sintiendo autocompasión por ella misma y maldiciéndose y odiándose y odiando al mundo... A veces me entraban ganas de tirar el libro, cosa que nunca me suele suceder y que siempre me da mucha pena hacer. Pero esta vez, sin duda lo debería haber hecho.
   Esta vez Nora me resultó la mayoría del tiempo insufrible. Nunca dejaba a hablar a quien tenía que hacerlo, sacaba conclusiones antes de tiempo y con muy poca información de por medio, confiaba en quien no debía y desconfiaba de los que eran amigos suyos... Me encontré con una chica hundida, destrozada, y que se sentía muy, muy sola. Algunas veces entendía por qué Becca Fitzpatrick hacía actuar a Nora de esta manera, pero otras deseaba que cambiara y recuperara parte de su madurez.
   A pesar de estos detalles, sigo igual de encariñada con ella, ya que es una persona entrañable, sometida a mucha presión y con un gran corazón.
   Siguiendo está línea hablaré sobre Vee, y mi queja vuelve a ser la misma que la vez anterior: no aparece casi nada en el libro. Me molesta mucho que todo se centre solamente en Nora y su pasado y todo lo que le rodea cuando Vee también es importante y meremos saber sobre ella. Aún así, sigo pensando que es una mejor amiga de primera y que es muy carismática y divertida al igual de locuela y lanzada. 
   En esta novela aparecen personajes nuevos como Scott. Al principio me caía muy, pero que muy mal. Pero, ahora, después de haber acabado el libro, he de decir que le quiero. Puede que Scott sea el personaje al que más aprecio le he cogido en esta continuación en menos de una página: estaba leyendo y le seguía odiando, hasta que de repente... ¡BUM! Derramé varias lágrimas y empecé a quererle y a apreciarle.
   Sigo sin poder decir que amo a Patch a pesar de todo lo que ha hecho en este libro. Creo que, para decir que le quiero muchísimo debería conocerle mejor, y eso es una cosa que no puedo hacer teniendo como narradora a Nora. Si tuviésemos un narrador en tercera persona podríamos saber con una mejor percepción lo que siente Patch y como piensa. Es cierto que a lo mejor podríamos perder esa aura de secretismo que rodea a nuestro ángel, pero tal vez fuera lo correcto.
   Sinceramente, al final comprendí el comportamiento de Patch y le perdoné por todo el daño que le hizo a Nora -y a mí, porque estar aguantando a Nora durante más de 300 páginas...-. Sigo pensando que con el tiempo podré decir que Patch es uno de mis personajes masculinos favoritos, pero todo tiene que ir a su ritmo.
    Por último, quería hablar sobre Marcie Millar. No me cae fatal, ni horriblemente mal. No me cae. Es cierto que la odié en muchas partes de la historia y me hubiera gustado matarla, pero si nos ponemos así ya de primeras habría acabado con Patch porque no entendía su comportamiento y con Nora por su actitud. Así que no pienso que Marcie sea la mala malísima de la saga. Ella es un personaje secundario que le da vidilla al libro, y en algunas ocasiones eso se agradece.
   Ahora sí, para terminar, quería decir que la novela me resultó aburrida y monótona. No pude parar de leer, leer y leer en este tiempo porque sentía que algo impactante iba a ocurrir, y dos de cada tres veces me equivocaba. 
   Puede que en algunas partes el libro os resulte aburrido -aproximadamente la gran mayoría-, pero merece la pena leerlo si ya habéis empezado con la saga. No os desesperéis. He aprendido que Becca Fitzpatrick es una escritora que siempre se guarda la guinda del pastel para el final, y que hay que tener paciencia con ella.
  Esto ha sido todo, mis QUERIDOS ÁNGELES.

OTROS TÍTULOS DE LA SAGA:
Silencio, tercera parte de la saga Hush Hush
Finale, cuerta parte de la saga Hush Hush


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